El misterio del jardín secreto
Mi nombre es Henry Wisconsin, un detective retirado que hoy a mis 56 años les voy a relatar lo que me ha tocado vivir en mi profesión una fría noche parisina.
Esto ocurrió una madrugada de 1892 cuando me encontraba descansando en el confort de mi habitación. De repente, un ruido proveniente del jardín del hotel llamó mi atención. Curioso, me asomé por la ventana y vi una sombra deslizándose entre los árboles. Al instante, decidí investigar.
Al salir al jardín, descubrí a una joven asustada. Era Margaux, la hija del dueño del hotel, quien había salido en busca de su gato desaparecido. Me contó que su preciado diario, donde confesaba todos sus secretos, había desaparecido misteriosamente.
Sin dudarlo, me ofrecí a ayudarla. Juntos, buscamos pistas y descubrimos un túnel oculto detrás de una enredadera. Decidimos adentrarnos en él. Al final del túnel, encontramos un antiguo baúl con el diario de Margaux.
Con valentía, lo recuperamos y al salir del túnel, nos topamos con el culpable: el mayordomo del hotel, quien quería utilizar los secretos de Margaux para chantajearla. Capturamos al malhechor y entregamos el diario al padre de Margaux.
Como reconocimiento, el padre me ofreció convertirme en el detective oficial del hotel, un honor que acepté con alegría. Desde entonces, he resuelto numerosos misterios en este mágico lugar, siempre dispuesto a ayudar a quienes lo necesiten.
FIN.