El misterio del jinete sin cabeza
En un pequeño pueblo rodeado de frondosos bosques, se contaba la leyenda del jinete sin cabeza. Según la historia, todas las noches de luna llena, el jinete fantasmal recorría los caminos en busca de su cabeza perdida.
Los niños del pueblo, asustados por esta historia, evitaban salir de noche y se entretenían contando historias de miedo. Pero un día, llegó al pueblo un niño llamado Martín, curioso y valiente, que decidió investigar el misterio del jinete sin cabeza.
"¿Por qué tienen miedo de ese jinete?", preguntó Martín a los otros niños. "¡Porque es un fantasma!", respondieron asustados. Martín, decidido a desentrañar el misterio, se adentró en el bosque en una noche de luna llena.
Allí, se encontró con un anciano sabio que le contó la verdadera historia del jinete sin cabeza.
Descubrió que en realidad el jinete era un hombre que había perdido la memoria, y que todos los habitantes del pueblo le habían dado la espalda por miedo a lo desconocido. Con compasión en su corazón, Martín decidió ayudar al jinete a recordar quién era y a encontrar su lugar en el mundo.
Con ingenio y valentía, Martín y el jinete sin cabeza emprendieron un viaje en el que superaron muchos desafíos. Finalmente, el jinete recordó su identidad y encontró su hogar.
El pueblo, al ver el valor y la compasión de Martín, aprendió a no juzgar a los demás por su apariencia o por lo que no comprenden. La leyenda del jinete sin cabeza se convirtió en una historia de esperanza y solidaridad. A partir de ese día, Martín se convirtió en el héroe del pueblo, enseñando a todos que el verdadero valor está en el corazón."
FIN.