El Misterio del Mall de Sol
Era un día soleado en el Mall de Sol, donde Angye y sus dos mejores amigas, Brithany y Nicole, se habían encontrado para pasar una tarde divertida. Mientras recorrían las tiendas, Angye sintió una extraña sensación en su estómago, como si algo misterioso estuviera a punto de suceder.
En una de las tiendas, se encontraron con Dayanara, la chica más popular de la escuela. Dayanara tenía una fama de ser muy competitiva, y a menudo se burlaba de las demás por lo que parecían. De repente, a Angye se le ocurrió que sería divertido explorar el rincón más oscuro y olvidado del mall, un lugar del que todos hablaban pero que nadie osaba visitar.
- “Che, ¿y si vamos al sótano del mall? ”, sugirió Angye, con una sonrisa traviesa.
- “¡Súper idea! ¡Nunca lo hicimos! ”, respondió Brithany emocionada.
- “Esperen… ¿no es un poco peligroso? ”, dudó Nicole.
Pero la emoción de la aventura ganó, y las chicas decidieron ir. Sin embargo, Dayanara, con una mirada burlona, decidió seguirlas.
- “¿Van a asustarse en el sótano? No creo que sean lo suficientemente valientes.”, dijo Dayanara con una sonrisa sarcástica.
Las chicas bajaron las escaleras al sótano, que era oscuro y lleno de sombras. A medida que avanzaban, empezaron a escuchar extraños ruidos y murmuraciones. El corazón de Angye latía acelerado.
- “No tengo miedo, ¿verdad? ¡Solo es un sótano! ”, murmuró Angye para sí misma, tratando de mantener la valentía.
De pronto, un ruido fuerte resonó en el fondo. Las chicas dieron un brinco y se miraron entre sí, con ojos desorbitados. Dayanara, que quería demostrar que no le temía, se adelantó.
- “Vamos, chicas, déjenme mostrarles cómo se hace”, dijo mientras avanzaba.
Mientras Dayanara se aventuraba más lejos, Angye y sus amigas se dieron cuenta de que estaban empezando a perder su valentía.
- “¡Vamos, Angye! ¡Es solo un poco de misterio! ¡Miremos! ”, gritó Brithany.
- “¿Y si hay algo realmente extraño aquí? ”, preguntó Nicole, inquieta.
Entonces, se encontraron con una puerta entreabierta y luces parpadeantes en el interior. Se miraron entre ellas, nerviosas, pero Angye sintió que tenía que liderar.
- “Voy a averiguar qué hay adentro”, dijo con determinación.
Juntas, empujaron la puerta con cuidado y entraron a un cuarto lleno de objetos extraños: luces de colores, viejas máquinas de música y hasta un telescopio. Allí encontraron un diario antiguo. Angye lo abrió y empezó a leer en voz alta:
- “Este lugar solía ser un centro de entretenimiento mágico, donde la creatividad reinaba. Sin embargo, perdió su esencia cuando las personas dejaron de soñar… "
Dándose cuenta de la importancia de mantener viva la creatividad, Angye empezó a idear un plan.
- “¡Chicas, tenemos que devolverle la magia a este lugar! Vamos a organizar un evento creativo aquí mismo, en el mall. ¡Invitemos a todos a soñar! ”
- “Pero Dayanara nunca nos dejaría hacer algo así”, insistió Nicole.
- “No importa, ¡nosotros podemos hacerlo”, afirmó Angye.
Decididas, comenzaron a planificar su evento. A medida que pasaron los días, trabajaron juntas para organizar un taller de arte, un espectáculo musical y una exposición de talentos. Dayanara, al ver su entusiasmo, se sintió intrigada.
- “¿Qué están haciendo aquí? ”, preguntó, acercándose.
- “¡Estamos devolviendo la magia al mall! ”, respondieron las chicas unidas.
- “¿Puedo ayudar? ”, preguntó Dayanara, sorprendiendo a Angye y a sus amigas.
Al principio, dudaron. Pero Angye, recordando el mensaje del diario, decidió darle una oportunidad.
- “¡Claro! Todos son bienvenidos.”
El gran día llegó, y el mall estaba lleno de vida. Las chicas brillarían en el escenario, mostrando sus talentos. Todos rieron, cantaron y disfrutaron de la creatividad que habían traído de vuelta.
- “Gracias por ayudarme a ver cómo incluir a todos”, le dijo Angye a Dayanara al finalizar el evento.
- “No lo habría hecho sin ustedes. Aprendí que también es divertido compartir”, respondió Dayanara sonriendo.
Y así, gracias al valor de Angye y la creatividad de sus amigas, el mall volvió a ser un lugar mágico donde la diversión y la amistad se unieron. Aprendieron que la valentía y la unión son más poderosas que cualquier rivalidad.
FIN.