El misterio del monstruo con pollera en Venado Tuerto
En un tranquilo pueblo llamado Venado Tuerto, la gente esperaba con ansias la llegada del año nuevo. Pero este año, un rumor particularmente emocionante estaba en boca de todos. Algunos afirmaban haber avistado a un monstruo con pollera merodeando por las afueras del pueblo.
Los niños, emocionados con la idea de un monstruo tan peculiar, no podían contener su curiosidad. En especial, Martina, una niña valiente y aventurera. Decidida a desentrañar el misterio, Martina convocó a sus amigos Mateo, Antonella y Agustín para buscar al monstruo con pollera.
Armados con linternas y valentía, los cuatro amigos se adentraron en el bosque en busca de pistas. Siguiendo rastros de pisadas y extrañas hojas de árbol, se encontraron con una criatura inesperada.
Al principio, la criatura asustó a los niños, pero pronto se dieron cuenta de que no era un monstruo, sino un amigable ciervo con una enorme pollera de tul atascada en sus astas. El pobre ciervo luchaba por liberarse, asustado y confundido.
Con cuidado, los niños se acercaron al ciervo y lograron liberarlo de la pollera. Agradecido, el ciervo se quedó un rato con ellos, jugueteando y compartiendo un momento mágico antes de desaparecer en el bosque.
Los niños regresaron al pueblo con una historia emocionante para contar. Decidieron que el misterio del monstruo con pollera era un tesoro que guardarían entre ellos, prometiendo seguir explorando juntos y compartir grandes aventuras en el futuro.
La noche de año nuevo llegó, y la emoción en el pueblo era palpable. Mientras esperaban la cuenta regresiva, los niños miraron al cielo lleno de estrellas, sabiendo que la verdadera magia no estaba en los monstruos, sino en la amistad, la valentía y la incredulidad que compartían.
Y en ese momento, cuando el reloj marcó la medianoche, los niños se abrazaron, sabiendo que el nuevo año les depararía muchísimas aventuras, todas llenas de misterio y emoción.
FIN.