El mundo ideal en mi escuela

Había una vez una escuela muy especial llamada Escuela del Arco Iris, donde todos los niños y niñas eran felices y se sentían queridos.

En esta escuela, no existían los bullys ni las peleas, ya que todos se trataban con respeto y amabilidad. Los profesores eran muy amables y se preocupaban por enseñar de una forma divertida y emocionante. Un día, llegó un niño nuevo llamado Juanito.

Al principio estaba un poco asustado, pero pronto se dio cuenta de que en la Escuela del Arco Iris todos eran bienvenidos. Además, en esta escuela, todos los días se realizaban actividades divertidas como juegos al aire libre, clases de arte, música y teatro.

Los alumnos aprendían a trabajar en equipo y a ayudarse mutuamente. Todos los días, antes de irse a casa, los estudiantes se reunían en el patio para compartir sus logros del día y dar las gracias por las cosas buenas que habían vivido.

En la Escuela del Arco Iris, todos aprendían a ser valientes, amables y a ser ellos mismos sin miedo. Juanito se convirtió en un niño valiente, seguro de sí mismo, y encontró amigos que lo querían tal como era.

En esta escuela, todos eran iguales y se respetaban. La Escuela del Arco Iris era un lugar donde los sueños se hacían realidad.

Y lo más maravilloso es que, dondequiera que estuvieran, los niños y niñas de la Escuela del Arco Iris llevaban en sus corazones los valores de amor, amistad y solidaridad.