El niño perdido en el bosque
Había una vez un niño llamado Mateo, a quien le encantaba explorar el bosque cerca de su casa. Un día, mientras jugaba, se adentró demasiado y se encontró completamente perdido.
Mateo intentó encontrar su camino de regreso, pero entre los árboles y la maleza, todo lucía igual. Pronto, la noche comenzó a caer y el miedo se apoderó de él. Estaba solo, asustado y no sabía qué hacer.
Entonces, recordó lo que su abuelita siempre le decía: “cuando te sientas perdido, busca la estrella más brillante en el cielo y te mostrará el camino a casa”. Mateo miró hacia arriba y vio una estrella resplandeciente. Sin dudarlo, decidió seguir su brillo.
Mientras caminaba, encontró huellas de animales y ramitas rotas que indicaban el paso de otros seres por el lugar. Decidió seguir esas pistas y, finalmente, vio la luz de una linterna. Era su papá, quien lo había estado buscando desesperadamente. Mateo corrió hacia él y lo abrazó con fuerza.
Desde ese día, Mateo aprendió que, aunque se sienta perdido, siempre habrá una forma de encontrar el camino de regreso a casa.
FIN.