El niño perdido en la selva

Había una vez un niño llamado Martín, que se perdió en la selva mientras jugaba con sus amigos. Al darse cuenta de que estaba solo, Martín entró en pánico y comenzó a llorar.

Sin embargo, decidió que no se rendiría y comenzó a buscar una salida. Mientras caminaba, Martín se topó con un grupo de monos traviesos que lo llevaron a su escondite en lo profundo de la selva.

Al principio, Martín estaba asustado, pero después de un rato se dio cuenta de que los monos solo querían jugar y divertirse. Juntos, exploraron la selva y Martín aprendió a sobrevivir en ese entorno.

A medida que pasaban los días, Martín se hizo amigo de los animales de la selva y aprendió a respetar y cuidar el medio ambiente. Finalmente, con la ayuda de sus nuevos amigos, Martín encontró el camino de regreso a casa.

A su regreso, Martín compartió su experiencia con sus amigos y les enseñó la importancia de respetar la naturaleza y cuidar el entorno. Desde entonces, Martín se convirtió en un defensor de los animales y el medio ambiente, inspirando a otros a seguir sus pasos.