El osito curioso y la manzana roja

Había una vez un osito muy curioso llamado Mateo, a quien le encantaba explorar y aprender sobre el mundo que lo rodeaba.

Un día, mientras paseaba por el bosque, se topó con una brillante manzana roja que colgaba de un árbol. El osito, emocionado por su hallazgo, decidió acercarse y examinarla. - ¡Qué bonita manzana! - exclamó Mateo con entusiasmo. Sin embargo, justo cuando estaba a punto de darle un mordisco, una voz juguetona lo detuvo.

- ¡Alto ahí, osito curioso! - dijo una pequeña hormiga que se encontraba en la manzana. - Antes de comerla, deberías aprender sobre el ciclo de vida de las plantas.

Ella le explicó al osito el proceso de polinización, crecimiento y maduración de las manzanas, y cómo estas proporcionan alimento a muchos animales del bosque. Fascinado con la lección, Mateo decidió no comer la manzana de inmediato, sino plantar sus semillas para que creciera un nuevo árbol.

Con la ayuda de la hormiga, el osito aprendió a sembrar y cuidar la planta, observando con asombro cómo crecía lentamente. Finalmente, tras mucha paciencia, el árbol dio sus frutos, y Mateo pudo recoger una hermosa manzana roja.

La historia de Mateo y la manzana roja se convirtió en un ejemplo para todos los animales del bosque, quienes aprenderán la importancia de cuidar y preservar la naturaleza para las futuras generaciones.