El paraguas de Masebru



Masebru era un joven muy perezoso que siempre se levantaba tarde, sin importar cuántas veces su mamá le pidiera que madrugara.

Un día, después de dormir hasta el mediodía, Masebru se despertó y lo primero que hizo fue enrolar su paraguas. "¿Qué haces con ese paraguas?" preguntó su mamá sorprendida al verlo. "No sé, solo me pareció divertido enrollarlo", respondió Masebru encogiéndose de hombros.

"Bueno, pero recuerda que los objetos tienen una función específica", dijo su mamá enseñándole algo nuevo. Masebru salió de casa sin prestar mucha atención a las palabras de su madre.

Caminando por la calle con su paraguas enrollado en la mano, encontró a un grupo de niños jugando fútbol en el parque. "¡Ey! ¿Quieres jugar con nosotros?" le preguntaron los niños emocionados al verlo pasar. "Sí, me encantaría" respondió Masebru entusiasmado mientras desenrollaba su paraguas y lo usaba como portería para el juego.

Los niños se divirtieron mucho jugando fútbol con la improvisada portería de Masebru.

Después del partido, uno de los niños se acercó a él y le preguntó:"Oye ¿cómo supiste que podías usar tu paraguas como portería?""En realidad no lo sabía", respondió Masebru honestamente. "Solo estaba aburrido y quería hacer algo diferente". El niño sonrió y le dijo: "Vaya! , eres muy creativo. A veces, las cosas más simples pueden ser útiles de maneras que ni siquiera imaginamos".

Masebru se sintió muy orgulloso al escuchar eso y decidió usar su creatividad en otras situaciones. Comenzó a pensar fuera de la caja y encontró soluciones ingeniosas para los problemas cotidianos.

Un día, mientras ayudaba a su mamá en el jardín, se dio cuenta de que podía usar su paraguas como sombrilla para protegerse del sol. También lo usó como una especie de caña de pescar improvisada para atrapar las hojas secas del jardín.

"¡Eres un genio!" dijo su mamá sorprendida por la habilidad de Masebru para encontrar nuevas formas de utilizar objetos comunes. A partir de ese día, Masebru aprendió que no hay límites cuando se trata de creatividad e imaginación.

Descubrió que cualquier objeto puede tener múltiples usos y que solo hace falta un poco de ingenio para encontrarlos. Desde entonces, siempre lleva consigo su paraguas enrollado como recordatorio de que la creatividad es una herramienta poderosa en la vida.

Y aunque siga siendo un poco perezoso para levantarse temprano, ahora sabe que cada día tiene infinitas posibilidades si usa su imaginación y piensa fuera de lo convencional.

FIN.

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