El parque de los merienditas saludables

Había una vez, en un colegio de la ciudad, un grupo de niños muy especiales. Estos niños se llamaban Lucas, Sofía, Martín y Valentina.

A diferencia de otros niños, a ellos les encantaba comer meriendas saludables antes del almuerzo. Cada día llevaban frutas frescas y sabrosas como manzanas, uvas y naranjas para compartir con sus amigos. Pero no solo eso, también se aseguraban de lavarse las manos antes de comer para mantenerse limpios y saludables.

Un día, mientras disfrutaban de su merienda en el patio del colegio, llegó corriendo el director emocionado. Tenía una noticia maravillosa: ¡el colegio había ganado un concurso nacional por tener los hábitos alimenticios más saludables! Los niños no podían creerlo.

Estaban tan felices que saltaron de alegría y se abrazaron unos a otros.

El director les explicó que habían ganado un premio muy especial: ¡una visita al famoso parque temático "El mundo mágico de la alimentación"! Al día siguiente, todos los niños subieron al autobús escolar con mucha emoción.

Al llegar al parque temático fueron recibidos por el señor Nutrición, quien les dio la bienvenida y les explicó cómo iban a vivir una aventura llena de aprendizaje sobre la importancia de llevar una vida sana. Primero visitaron el Jardín Frutal Encantado donde conocieron a personajes divertidos como Don Manzana y Doña Naranja.

Estos personajes les enseñaron todo sobre las vitaminas y minerales que se encuentran en las frutas y cómo ayudan a mantenernos fuertes y saludables. Después, fueron al Bosque de los Dientes Brillantes, donde conocieron al Hada del Cepillo.

Ella les enseñó la importancia de cepillarse los dientes después de cada comida para mantenerlos limpios y prevenir caries. Los niños quedaron maravillados con las historias del hada y prometieron cepillarse los dientes tres veces al día.

La siguiente parada fue el Río de las Manos Limpias, donde el señor Jabón les enseñó cómo lavarse correctamente las manos antes de comer. Les explicó que así evitaban la propagación de gérmenes y enfermedades. Los niños aprendieron que el agua y el jabón son sus mejores aliados para mantenerse sanos.

Finalmente, llegaron al Gran Banquete Saludable, donde pudieron disfrutar de un almuerzo lleno de alimentos nutritivos como ensaladas frescas, pescado asado y arroz integral. Todos estaban muy contentos porque sabían que estaban alimentando su cuerpo con lo mejor.

Al regresar al colegio, Lucas, Sofía, Martín y Valentina se dieron cuenta de lo afortunados que eran por tener hábitos alimenticios saludables. Comenzaron a compartir todo lo que habían aprendido con sus amigos en clase.

Poco a poco, todos los niños del colegio empezaron a seguir su ejemplo. Comenzaron a llevar meriendas saludables, lavarse las manos antes de comer y cepillarse los dientes después de cada comida. El colegio se convirtió en un lugar más feliz y sano gracias a estos valiosos hábitos.

Y así fue como Lucas, Sofía, Martín y Valentina, junto con sus amigos del colegio, demostraron que llevar una vida saludable no solo es importante para nosotros mismos, sino también para compartir y contagiar a los demás.

Juntos crearon un mundo lleno de buenos hábitos alimenticios, donde todos se cuidaban y se querían mucho. Y colorín colorado, esta historia llena de aprendizaje y diversión ha terminado.

¡Pero recuerda siempre comer sano, lavarte las manos y cepillarte los dientes!