El pastel robado
Alex estaba emocionado por la fiesta de cumpleaños de sus amigos María y Daniel. Él sabía que a los primos les encantaba comer, así que decidió preparar una mesa llena de platos deliciosos.
Desde temprano en la mañana, Alex se puso manos a la obra en la cocina. Preparó empanadas criollas rellenas de carne y pollo, tortillas con queso derretido y vegetales frescos, y un pastel de chocolate con crema chantilly y frutas del bosque.
Mientras tanto, María y Daniel estaban ocupados decorando el pueblo con plantas del campo cercano al colegio.
Escogieron margaritas amarillas y rojas para las mesas, pequeñas macetas con cactus para los rincones más oscuros, e incluso construyeron un arco floral para darle la bienvenida a los invitados. Cuando llegó el momento de la fiesta, todo estaba listo. La música sonaba fuerte y alegre mientras los amigos se reunían alrededor de la mesa llena de comida.
"¡Qué rico huele todo!" exclamó María mientras tomaba una empanada. "¡Esto es increíble!" dijo Daniel mientras probaba una tortilla caliente. Los invitados no podían parar de comer y beber jugo natural hecho por Alex.
Entre risas y charlas animadas, todos disfrutaron del ambiente festivo que habían creado juntos. Pero cuando llegó el momento del postre algo extraño sucedió: el pastel había desaparecido sin dejar rastro.
Todos se miraron desconcertados hasta que alguien señaló hacia afuera donde vieron una sombra corriendo por el campo. "¡Es un zorro!" exclamó Daniel mientras salía corriendo detrás del animal. Los demás se quedaron en la fiesta, riendo y divirtiéndose.
Pronto regresó Daniel con el pastel intacto en sus manos, explicando que había logrado recuperarlo antes de que el zorro lo devorara. La fiesta continuó hasta altas horas de la noche, con música y baile bajo las estrellas.
Alex se sintió feliz al ver a sus amigos disfrutar tanto de la comida que había preparado, y María y Daniel se sintieron orgullosos de haber creado una decoración tan hermosa para la ocasión. Al final de la noche, todos se despidieron con abrazos y promesas de volver a verse pronto.
La amistad entre ellos era más fuerte que nunca gracias a esta maravillosa fiesta llena de sabor y alegría.
FIN.