El pastor Miguel y el leñador desobediente


Había una vez en un tranquilo valle, un pastor llamado Miguel que cuidaba con cariño a su rebaño de ovejas.

Un hermoso día, mientras las ovejas pastaban apaciblemente, Miguel vio a lo lejos a un leñador talando árboles en un lugar donde había un cartel que decía: 'Prohibido la tala de árboles'. Miguel, preocupado por la salud del bosque, decidió acercarse al leñador. - ¿Qué estás haciendo? , preguntó Miguel con tono serio.

- Estoy cortando árboles para vender la madera, respondió el leñador con indiferencia. Miguel, consternado por la falta de respeto hacia la naturaleza, le explicó al leñador la importancia de cuidar los árboles y respetar las normas.

El leñador, sin embargo, no le hizo caso y continuó con su tarea. Miguel, decidido a proteger el bosque, fue a la ciudad y presentó una denuncia ante las autoridades. La noticia se esparció por el valle y muchos vecinos se unieron a Miguel en su lucha por preservar el bosque.

Finalmente, gracias a la valiente acción de Miguel, el leñador fue multado y se comprometió a replantar los árboles que había talado.

La historia de Miguel inspiró a los habitantes del valle a cuidar y proteger la naturaleza, entendiendo que todos podemos hacer la diferencia si trabajamos juntos en armonía con el medio ambiente.

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