El patito aventurero y sus nuevos amigos
Había una vez un pequeño patito que vivía felizmente junto a su mamá en un estanque. Un día, mientras jugaba con sus amigos, el patito se alejó demasiado y se perdió.
El patito comenzó a nadar sin rumbo fijo, tratando de encontrar a su madre. Pero cuanto más nadaba, más lejos parecía estar de su hogar. El sol comenzaba a ponerse y el patito estaba cada vez más asustado.
De repente, vio una figura acercándose hacia él desde el agua. Era una tortuga amable que se ofreció a ayudarlo. "¿Estás perdido?" preguntó la tortuga al patito preocupada. "Sí" respondió el patito con tristeza "no puedo encontrar mi casa ni a mi mamá.
""No te preocupes," dijo la tortuga tranquilamente "te ayudaré a encontrar tu camino de regreso. Ven conmigo". La tortuga llevó al patito por el estanque y lo presentó con algunos nuevos amigos: un castor trabajador y un cisne elegante.
Los tres animales decidieron ayudar al pequeño pato perdido en su búsqueda para volver a casa. Juntos exploraron todo el estanque hasta que finalmente encontraron la guarida del pequeño pato.
"Mamá! Mamá!" gritó emocionado el pequeño cuando la vio aparecer en la entrada de su hogar. "¡Hijo mío! ¡Te he estado buscando por todas partes!" exclamó su mamá abrazándolo fuertemente. El pequeño aprendió una valiosa lección ese día: nunca debía alejarse demasiado sin avisarles antes a sus padres.
Pero también aprendió que siempre hay amigos dispuestos a ayudar en los momentos de necesidad.
Desde ese día, el pequeño pato y sus nuevos amigos se convirtieron en compañeros inseparables, explorando juntos el estanque y disfrutando de la vida al máximo.
FIN.