El pequeño héroe del jardín

Había una vez un niño llamado Tomi, que con sus dos años de edad estaba ansioso por comenzar el jardín. Su mamá lo llevó en su primer día y él miraba todo con ojos curiosos y brillantes.

En el jardín, la señorita Clara lo recibió con una sonrisa cálida y le mostró su sala llena de juguetes coloridos y otros niños.

Tomi se acercó tímidamente a un grupo de chicos que estaban construyendo bloques y les dijo: "Hola, soy Tomi". Los chicos lo miraron sorprendidos al ver a alguien tan pequeño allí. "¡Hola Tomi! ¿Querés jugar con nosotros?" -preguntó Martina, una niña simpática con trenzas rosadas. "Sí, ¡jugar!" -respondió Tomi emocionado.

Así, poco a poco, Tomi fue integrándose al grupo. Descubrió nuevos juegos, aprendió canciones divertidas y disfrutó de las actividades creativas. A pesar de ser el más chiquito del jardín, demostraba valentía e interés en aprender cada día más.

Una mañana, durante el recreo en el patio del jardín, Martina se tropezó y cayó al piso lastimándose la rodilla. Todos los niños se acercaron preocupados pero no sabían qué hacer.

Entonces Tomi recordó cuando su mamá le soplaba suavemente cuando se lastimaba para sentirse mejor. "¡Esperen!" -exclamó Tomi mientras soplaba delicadamente la rodilla de Martina. "¡Ayuda! ¡Me duele menos ahora!" -dijo Martina sorprendida y contenta.

La señorita Clara llegó corriendo al escuchar los gritos y vio a Tomi cuidando a su amiga. Estaba impresionada por la empatía y ternura del pequeño niño. Desde ese día, todos los niños del jardín admiraban a Tomi por su valentía y solidaridad.

Se convirtió en un ejemplo para ellos, demostrando que no importa cuán pequeños seamos, siempre podemos hacer grandes cosas si tenemos buen corazón.

Al finalizar el año escolar, en la entrega de diplomas frente a todos los papás orgullosos, la señorita Clara mencionó: "Tomi nos enseñó que la edad no define nuestra capacidad para marcar la diferencia en el mundo".

Y así, entre aplausos y sonrisas cómplices entre padres e hijos, terminó esta historia donde un niño pequeño encontró amistad y aprendizaje en el jardín infantil.