El perrito feliz

Había una vez en un hermoso pueblo, un perrito llamado Rufus. Rufus era un perrito muy feliz que vivía en una casa con una familia cariñosa.

Todos los días, Rufus salía a pasear por el parque y jugaba con sus amigos perrunos. Un día, mientras exploraba el parque, Rufus encontró a un perrito llamado Lola, que lucía muy triste. -Hola, ¿cómo estás? -le preguntó Rufus a Lola.

-Hola, estoy muy triste, perdí mi juguete favorito y no puedo encontrarlo -respondió Lola con voz apagada. Rufus, lleno de alegría y entusiasmo, le dijo a Lola: -No te preocupes, ¡vamos a buscarlo juntos! Así que Rufus y Lola empezaron a buscar por todo el parque.

Pasaron por debajo de los árboles, revisaron detrás de las bancas y buscaron en cada rincón. Finalmente, Rufus divisó algo brillante detrás de unos arbustos.

¡Era el juguete de Lola! Rufus lo agarró con su hocico y corrió hacia Lola con la cola moviéndose de un lado a otro de tanta emoción. -¡Lo encontré, lo encontré! ¡Aquí está tu juguete! -exclamó Rufus. Lola dio un brinco de alegría y agradeció a Rufus con un lametazo. Desde ese día, Lola y Rufus se convirtieron en los mejores amigos.

Descubrieron que ayudar a los demás y trabajar juntos los hacía muy felices. Y así, juntos, vivieron muchas aventuras, siempre dispuestos a ayudar a quienes lo necesitaran.