El perro bailarín
En una tranquila y colorida ciudad, vivía Lucas, un niño muy curioso y entusiasta. Un día, paseando por el parque, Lucas se encontró con un perro callejero llamado Toby. Toby era un perro muy especial, ya que le encantaba bailar al ritmo de la música que escuchaba. Lucas quedó fascinado al ver al perro moverse con tanta gracia y alegría. -
—¡Wow, Toby! ¡Eres increíble! —exclamó Lucas, sorprendido. Toby movió la cola felizmente, contento de haber encontrado a alguien que apreciara su talento. A partir de ese día, Lucas y Toby se volvieron inseparables.
Un mes después, la ciudad organizó un concurso de talentos en el que cualquier persona o animal podía participar. Lucas, emocionado, decidió inscribir a Toby en el concurso para mostrar su increíble habilidad para bailar. Sin embargo, cuando llegó el día del concurso, Toby se puso nervioso y dudó de sus habilidades. -
—Tranquilo, Toby. Tú bailas con el corazón, y eso es lo que importa —le dijo Lucas, animándolo. Con el apoyo de su amigo, Toby decidió salir al escenario.
Al sonar la música, Toby comenzó a moverse con gracia y energía, cautivando a toda la audiencia con sus pasos de baile. La gente aplaudía y vitoreaba, asombrada por el talento del singular dúo. Cuando terminó su presentación, Toby recibió una ovación de pie. Había demostrado que, a pesar del miedo, podía brillar en el escenario. Toby y Lucas se abrazaron emocionados, felices de haber compartido ese momento juntos. Desde ese día, Toby se convirtió en el perro más famoso de la ciudad, y Lucas nunca dejó de apoyarlo en cada uno de sus éxitos.
FIN.