El perro, el gato y el ratón en San Martín
En un pequeño pueblo de Argentina llamado San Martín, vivían un perro llamado Pancho, un gato llamado Mishi y un ratón llamado Ratoncito.
Pancho vivía en una casa grande y espaciosa con un patio trasero donde le encantaba corretear y jugar. Mishi era un gato travieso que deambulaba por los techos de las casas, buscando aventuras. Mientras tanto, Ratoncito vivía en una madriguera cerca de la plaza principal.
Aunque eran muy diferentes, los tres animales eran amigos y se divertían juntos. Un día, Pancho, Mishi y Ratoncito se encontraron en el parque y decidieron explorar juntos un bosque cercano."¿Por qué no exploramos el bosque juntos?", sugirió Pancho.
"Eso suena genial, pero ¿no deberíamos tener cuidado con los peligros del bosque?", preguntó Mishi. "Sí, tienes razón. Pero si vamos juntos, podemos cuidarnos mutuamente", respondió Ratoncito con entusiasmo. Los tres amigos se adentraron en el bosque, maravillándose con la naturaleza que los rodeaba. De repente, escucharon un ruido extraño y se detuvieron.
Descubrieron que el ruido provenía de un pajarito atrapado en una red.
Sin dudarlo, Pancho utilizó su fino olfato para encontrar al cazador, Mishi trepó ágilmente por un árbol para cortar la red con sus afiladas garras, y Ratoncito roía la cuerda que sostenía al pajarito. Liberaron al ave y siguieron explorando el bosque, enfrentando juntos cada desafío que se les presentaba.
Después de una larga aventura, regresaron a San Martín con gratos recuerdos y la satisfacción de haber trabajado en equipo para superar obstáculos. Desde ese día, Pancho, Mishi y Ratoncito se convirtieron en los héroes de San Martín, enseñando a otros animales la importancia de la amistad, la colaboración y la valentía."¡Nunca
pensé que trabajando juntos podríamos lograr tanto!", exclamó Pancho, sonriendo. "Tienes razón, amigos, la unión hace la fuerza. Juntos somos imparables", dijo Mishi con orgullo. "Así es, y siempre estaremos aquí el uno para el otro", agregó Ratoncito, emocionado.
Desde entonces, el perro, el gato y el ratón continuaron viviendo sus vidas en San Martín, pero ahora sabían que juntos podían superar cualquier desafío que se les presentara.
FIN.