El Pirata con Parche

Había una vez un nene llamado Mateo, que tenía una amiguita muy especial: su ojo derecho miraba hacia otro lado, lo que se llama hipertropia.

El doctor le dijo a Mateo que tenía que usar un parche en el ojo bueno para entrenar al otro ojito a mirar en la dirección correcta. Pero Mateo no quería usar el parche, le parecía incómodo y no quería parecer diferente.

Sin embargo, un día, mientras se miraba al espejo con el parche puesto, algo maravilloso sucedió.

Mateo notó que, cada vez que se ponía el parche, algo mágico pasaba: ¡se convertía en un valiente pirata con un parche en el ojo! -¡Ahoy, compañeros! -exclamó Mateo mientras se veía a sí mismo vestido con un sombrero de pirata y un parche, en las aventuras más emocionantes. Mateo vivió increíbles aventuras en alta mar, buscando tesoros y luchando contra terribles criaturas del océano.

Con el parche, Mateo se sentía valiente y capaz de enfrentar cualquier desafío. Poco a poco, Mateo comenzó a comprender la importancia de su parche y lo especial que era.

Descubrió que podía enseñarle al ojito perezoso a mirar bien, ¡y también disfrutar de ser un intrépido pirata! Con el tiempo, Mateo empezó a usar el parche sin miedo ni vergüenza, porque sabía que le esperaban emocionantes aventuras cada vez que lo usaba. Y así, Mateo se convirtió en un audaz pirata dispuesto a explorar el mundo con valentía y determinación.