El poder de cuidar nuestro planeta
Había una vez un dinosaurio llamado Benito que vivía en un hermoso bosque cerca del mar. Benito era muy curioso y siempre estaba explorando su entorno para descubrir cosas nuevas.
Un día, mientras caminaba por la playa, encontró algo inusual: una gran cantidad de basura y plástico esparcidos por todas partes. Esto hizo que Benito se sintiera triste y preocupado por el estado del planeta Tierra.
Decidido a hacer algo al respecto, Benito decidió iniciar una campaña de reciclaje en su comunidad. Reunió a todos sus amigos dinosaurios y les explicó la importancia de cuidar el medio ambiente y cómo podían ayudar reciclando. Mientras trabajaban arduamente para limpiar la playa, algo sorprendente sucedió.
Un ovni apareció en el cielo y descendió justo frente a ellos. De él salió un hombre vestido con un traje espacial brillante. "-¡Hola! Soy el Hombre del Espacio", dijo el extraño visitante.
"-He oído hablar de tus esfuerzos para proteger nuestro planeta y quiero ayudarte". Benito estaba emocionado de tener ayuda adicional, así que le mostró al Hombre del Espacio toda la basura que habían recolectado.
El Hombre del Espacio sacó una máquina mágica de su nave espacial que podía convertir el plástico en materiales reutilizables. Juntos, empezaron a trabajar sin descanso convirtiendo todo ese plástico en nuevos objetos útiles como juguetes, muebles e incluso instrumentos musicales para los dinosaurios.
Mientras tanto, desde las profundidades del océano emergió una hermosa sirena llamada Marina. Ella había sentido la tristeza de Benito y decidió ayudar también. Con su voz melodiosa, convocó a todos los animales marinos para que se unieran al esfuerzo de limpieza.
Los delfines recogieron la basura flotante, las tortugas recolectaron el plástico atrapado en redes abandonadas y los peces pequeños se encargaron de clasificar los desechos por colores.
Poco a poco, la playa volvió a lucir limpia y hermosa gracias al trabajo en equipo de Benito, el Hombre del Espacio y Marina. Juntos demostraron que con determinación y cooperación, cualquier problema puede ser resuelto.
La noticia sobre la campaña de reciclaje llegó a oídos de personas de todo el mundo, inspirándolas a tomar medidas similares en sus propias comunidades. Pronto, otros dinosaurios y humanos comenzaron a trabajar juntos para proteger el medio ambiente. Benito se sintió muy orgulloso de lo mucho que habían logrado.
Su bosque estaba más limpio que nunca y él sabía que estaba dejando un legado positivo para las futuras generaciones. Desde ese día en adelante, Benito continuó siendo un defensor del medio ambiente junto con sus amigos dinosaurios.
Trabajaban arduamente para educar a otros sobre la importancia del reciclaje y cómo cada pequeño acto podía marcar una gran diferencia. Y así fue como Benito el dinosaurio descubrió que no importaba cuán grande o pequeño seas, todos podemos hacer nuestra parte para cuidar nuestro querido planeta Tierra.
FIN.