El poder de la naturaleza


Había una vez en un pequeño pueblo llamado Bosquecito, una niña llamada Rosita. Ella vivía con sus padres y siempre había sido muy curiosa y amante de la naturaleza.

Un día, mientras paseaba por el bosque, encontró a su abuela sentada en un claro rodeada de libros. Escena 1: Educación no formal- ¡Abuelita! ¿Qué estás haciendo aquí? - preguntó sorprendida Rosita. - Hola mi querida Rosita.

Estoy disfrutando de la belleza del bosque y leyendo estos maravillosos libros que me enseñan tantas cosas interesantes - respondió la abuela sonriendo. Rosita se acercó a su abuela y le pidió que le enseñara todo lo que sabía.

Desde ese momento, cada tarde después de la escuela, la abuela le daba clases sobre diferentes temas como plantas medicinales, animales del bosque y ecología. Escena 2: Dimensiones educativasLa educación no formal de Rosita despertó en ella una pasión por aprender más sobre su entorno.

Comenzó a investigar por su cuenta y a compartir sus conocimientos con sus amigos del colegio. Un día, durante el recreo, les contó emocionada sobre los beneficios de reciclar y cómo cuidar el medio ambiente.

Sus amigos quedaron fascinados e inspirados por las palabras de Rosita. Escena 3: Instituciones educativasEl director del colegio escuchó hablar sobre las habilidades académicas y sociales que tenía Rosita gracias a su educación no formal. Decidió invitarla a dar charlas semanales para todos los estudiantes.

Rosita aceptó encantada y cada semana compartía con sus compañeros los conocimientos que había adquirido. Además, el director decidió crear un club de ecología en el colegio, donde Rosita era la líder. Escena 4: Cultura institucionalLa cultura del colegio comenzó a cambiar.

Los estudiantes se volvieron más conscientes sobre la importancia del cuidado del medio ambiente y comenzaron a implementar acciones para protegerlo. El colegio plantó árboles, reciclaba papel y plástico, e incluso organizaban limpiezas de parques cercanos.

Todos estaban comprometidos en convertirse en una escuela sustentable. Escena 5: Actores y conflictosSin embargo, no todos estaban contentos con estos cambios. El Sr.

Lobo, un hombre egoísta que vivía al lado del bosque, no quería que se alterara su estilo de vida. - ¡Esto es ridículo! - gritaba el Sr. Lobo desde su ventana - No necesitamos preocuparnos por el medio ambiente, solo quiero vivir tranquilo sin tener que hacer nada más.

Rosita sabía que tenía que hacer algo al respecto y decidió hablar con él para mostrarle lo importante que era cuidar el bosque para las generaciones futuras. Escena 6: Destino educativoRosita visitó al Sr.

Lobo llevándole libros sobre la naturaleza y le explicó cómo su actitud podía afectar negativamente a todos los habitantes del pueblo. Poco a poco, el corazón del Sr. Lobo se fue ablandando al ver la pasión y dedicación de Rosita por proteger el bosquecito.

Decidió unirse al club de ecología y ayudar en todas las actividades. Desde ese día, el Sr. Lobo se convirtió en un gran defensor del medio ambiente y promovía acciones sostenibles en todo el pueblo.

Rosita, con su educación no formal y su determinación, logró cambiar la mentalidad de las personas y proteger el bosquecito para siempre. Su historia inspiró a muchos otros niños a seguir sus pasos y cuidar el planeta.

Y así, Rosita demostró que la educación no solo se encuentra en las instituciones formales, sino también en la pasión por aprender y enseñar a los demás.

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