El primer día de clases de Sebastián y sus amigos

Sebastián estaba emocionado por el primer día de clases. Se levantó temprano, se vistió con su uniforme escolar y desayunó con entusiasmo. Al llegar a la escuela, se reunió con sus amigos Mateo, Sofía y Valentina en el patio.

-¡Hola amigos! ¿Están listos para empezar un nuevo año escolar? -les preguntó Sebastián con una sonrisa. Mateo respondió emocionado: -¡Claro que sí! Vamos a aprender un montón de cosas nuevas y divertirnos juntos.

Sofía asintió y agregó: -Y este año vamos a hacer muchas actividades y proyectos interesantes. Pero justo cuando estaban por entrar al aula, vieron a un compañero nuevo solo y tímido en un rincón. Era Lucas, quien acababa de mudarse a la ciudad.

Sebastián se acercó con amabilidad y le dijo: -¡Hola! Soy Sebastián, ¿quieres venir con nosotros? Así conocerás a todos. Lucas asintió tímidamente y se unió al grupo. Durante la clase, la maestra propuso un juego para que todos se conocieran mejor.

Cada uno debía contar algo sobre sí mismo. Sebastián contó sobre su amor por el fútbol, Mateo compartió su afición por la pintura, Sofía habló de su pasión por la lectura y Valentina mencionó su interés por la música.

Cuando llegó el turno de Lucas, titubeó un momento, pero luego habló sobre su gusto por la naturaleza. Al terminar la clase, Sebastián y sus amigos invitaron a Lucas a jugar en el patio.

A medida que pasaban los días, Lucas se integró completamente al grupo. Juntos vivieron muchas aventuras, aprendieron unos de otros y se apoyaron en los momentos difíciles. El primer día de clases no solo marcó el inicio de un nuevo año escolar, sino también el comienzo de una hermosa amistad.