El puzzle de la paciencia

Había una vez una niña llamada Alis que adoraba los puzzles. Pasaba horas emocionada tratando de encajar cada pieza en su lugar. Sin embargo, un día, se encontró con un puzzle muy complicado que no lograba completar.

Alis se frustró tanto que comenzó a llorar y, sin pensarlo dos veces, tiró todas las piezas al suelo.

Su mamá, viendo la situación, se acercó a Alis y le dijo: "Hey, Alis, entiendo que te sientas frustrada, pero sé que puedes superar este reto. Primero, respira profundo conmigo. Inhala... exhala... Y ahora, vamos a intentarlo de nuevo, pero esta vez, con paciencia y calma." Alis asintió con timidez y siguió las indicaciones de su mamá.

Poco a poco, fue recogiendo las piezas y, con paciencia, comenzó a intentar encajarlas nuevamente. Con cada intento, su mamá la alentaba: "Eso es, Alis. Un paso a la vez. No te desanimes."

Finalmente, después de varios intentos, Alis logró encajar la última pieza, completando el puzzle con una sonrisa de orgullo en su rostro. Desde ese día, Alis aprendió que la paciencia y la calma son clave para superar los momentos de frustración, y que con determinación, puede alcanzar sus metas."