El regalo de la generosidad

Hace mucho tiempo, en el pintoresco valle del Mantaro, existía un pequeño pueblo llamado Paca. Un día, un anciano mendigo llegó al pueblo, cansado y sediento, buscando un poco de agua.

Fue de casa en casa, pero los habitantes, desconfiados y egoístas, le cerraban la puerta en el rostro. Pero un niño llamado Facundo lo vio y, a pesar de las advertencias de los adultos, decidió ayudarlo.

Con valentía, llevó al anciano a su propia casa y le ofreció agua y comida. El anciano, agradecido, le regaló un pequeño objeto mágico: un colgante en forma de estrella. Le explicó que, si alguna vez necesitaba ayuda, debía pronunciar las palabras mágicas que lo acompañaban. Facundo guardó el colgante con cariño.

Días después, un gran incendio amenazó al pueblo. Los habitantes, asustados, no sabían qué hacer. Facundo, recordando las palabras mágicas, pronunció: 'Brillo estelar, ayúdanos a salvar nuestro hogar'.

De repente, el colgante brilló intensamente y un torrente de agua mágica surgió de él, apagando el fuego. Los habitantes quedaron asombrados. A partir de ese día, aprendieron la importancia de la generosidad y la solidaridad.

Facundo se convirtió en un pequeño héroe, y el pueblo de Paca nunca más rechazó a quienes necesitaban ayuda.