El regalo de la solidaridad

Érase una vez en el barrio de Villa Feliz, un grupo de amigos formado por Martina, Juanito, Sofía y Tomás.

Un día, mientras jugaban en el parque, vieron a un niño llamado Emilio que estaba triste porque no tenía juguetes para jugar. Los amigos se acercaron para preguntarle qué le pasaba y él les contó que su familia no tenía mucho dinero para comprarle juguetes. Al escuchar esto, Martina tuvo una idea brillante.

"¿Y si compartimos algunos de nuestros juguetes contigo? Así podrás jugar con ellos siempre que quieras", propuso Martina con una sonrisa. Emilio no podía creerlo, pero aceptó la generosa oferta. Los amigos se dirigieron a sus casas y buscaron juguetes que ya no usaban tanto.

Cada uno seleccionó uno o dos y se los dieron a Emilio. El niño no podía estar más feliz. Desde entonces, los cinco amigos jugaban juntos en el parque, compartiendo sus juguetes y creando recuerdos inolvidables.

Al ver la felicidad de Emilio, Martina, Juanito, Sofía y Tomás comprendieron lo maravilloso que era ayudar a los demás. Decidieron organizar una colecta de juguetes en el barrio para hacer felices a más niños.

Pronto, el grupo creció y muchos niños donaron juguetes que ya no necesitaban. Así, aprendieron que la solidaridad y el compartir pueden hacer del mundo un lugar mucho más hermoso.