El regalo de la tía
Había una vez una niña llamada Sofi que comenzaba a ir al jardín de infantes. Al principio, le costaba un poco adaptarse, pero pronto se divirtió mucho jugando con sus compañeros. Sin embargo, siempre extrañaba mucho a su amada tía Marta, quien la cuidaba cuando sus papás trabajaban. Sofi anhelaba estar con su tía y extrañaba sus abrazos tan reconfortantes.
Un día, la maestra le pidió a Sofi que la acompañara al patio del jardín. ¡Para su sorpresa, vio a su tía Marta parada allí con una gran sonrisa en su rostro! Sofi corrió hacia ella y la abrazó fuerte.
- Tía, ¿qué estás haciendo aquí? -preguntó Sofi emocionada.
- Vine a sorprenderte y a traerte un regalo -respondió su tía con alegría mientras le entregaba una caja envuelta en papel de colores brillantes.
Sofi abrió el regalo con entusiasmo y descubrió un hermoso libro de cuentos. La tía Marta le explicó que podrían leer juntas esos cuentos antes de ir a dormir todas las noches. La niña estaba tan emocionada y agradecida que no podía dejar de sonreír.
Desde ese día, Sofi y su tía compartieron momentos maravillosos leyendo cuentos juntas. La niña se sentía feliz y comprendió que su tía siempre estaría ahí para ella, incluso cuando no podía estar físicamente. Además, aprendió que la familia y el amor pueden estar presentes en diferentes formas, y que el cariño y el cuidado siempre prevalecen.
Sofi ya no extrañaba tanto a su tía durante el día en el jardín, porque ahora sabía que siempre estaría en su corazón y que tendrían momentos especiales para disfrutar juntas.
El cariño familiar y la importancia de cultivar momentos especiales con los seres queridos fueron las lecciones que Sofi aprendió de esa experiencia. Y así, la niña continuó su feliz aventura en el jardín, llevando consigo el amor y la sabiduría que le brindaba su tía.
FIN.