El regalo del altruismo
Había una vez en un pequeño pueblo una joven llamada Lola, a quien le encantaba ayudar a los demás. Siempre estaba dispuesta a tender una mano a quien lo necesitara.
Un día, Lola se encontró con un problema difícil de solucionar por sí sola. Estaba preocupada y no sabía qué hacer. -¿Cómo podré resolver esto? -se preguntaba, sintiéndose sola y desanimada.
Sin embargo, recordó a todas las personas a las que había ayudado en el pasado, y decidió pedirles su apoyo. Una a una, esas personas acudieron a ayudar a Lola, devolviéndole el favor. Juntos, encontraron la solución al problema, y Lola se sintió muy agradecida por todo el apoyo que recibió.
Con el corazón lleno de gratitud, Lola decidió compartir su experiencia con otros, enseñándoles la importancia del altruismo y cómo la ayuda mutua puede hacer una gran diferencia en la vida de las personas.
Al ver el impacto positivo que podía tener su ejemplo, más y más personas se unieron a Lola en la práctica del altruismo, creando así una cadena de bondad y solidaridad que transformó el pueblo en un lugar más unido y feliz.
FIN.