El regalo del corazón
Había una vez una linda niña llamada Sofía, quien tenía una hermanita menor llamada Valentina. Ellas eran muy unidas y compartían momentos llenos de risas y alegrías.
Sin embargo, un día triste, Valentina se fue al cielo dejando a Sofía con el corazón roto. Sofía extrañaba tanto a su hermanita que no podía dejar de llorar. Pasaban los días y la tristeza parecía apoderarse cada vez más de ella.
Su mamá intentaba consolarla, pero nada parecía funcionar. Un día, mientras caminaba por el parque con su mamá, Sofía encontró a un viejito sentado en un banco alimentando a las palomas. El viejito tenía una sonrisa amable y ojos llenos de sabiduría.
"Hola pequeña"- dijo el viejito con ternura. "¿Por qué estás tan triste?"Sofía miró al viejito con sus ojos llenos de lágrimas y le contó sobre su pérdida.
El viejito escuchó atentamente y luego le dijo:"Querida Sofíta, sé que extrañas mucho a tu hermanita Valentina, pero debes recordar que ella siempre estará en tu corazón y en tus recuerdos". Sofia asintió tímidamente mientras secaba sus lágrimas. "Además"- continuó el viejito"Valentina te está cuidando desde el cielo y quiere verte feliz".
Sofia levantó la mirada hacia el cielo azul brillante e imaginó a su hermanita sonriendo desde allá arriba. En ese momento, el viejito sacó de su bolsillo un libro mágico. Era un libro lleno de historias maravillosas y aventuras emocionantes.
"Sofía"- dijo el viejito"Este libro tiene algo especial. Cada vez que lo leas, te llevará a lugares fantásticos donde podrás aprender valiosas lecciones". Los ojos de Sofía se iluminaron con curiosidad y emoción.
Desde ese día, Sofía comenzó a leer el libro mágico todas las noches antes de dormir. A través de sus páginas, viajaba a mundos increíbles donde conocía nuevos amigos y aprendía importantes enseñanzas.
Una noche, mientras leía una historia sobre la importancia de la amistad, Sofía tuvo una idea brillante. Decidió que quería hacer algo especial en honor a Valentina y compartir su alegría con otros niños.
Sofia reunió a sus amigos del colegio y juntos planearon organizar una feria en el parque para recaudar fondos para los niños necesitados. Fueron días ocupados llenos de risas, pintura y preparativos. El día de la feria llegó y todo estaba listo para recibir a las familias del vecindario.
Habían juegos divertidos, puestos de comida deliciosa e incluso un escenario donde los niños podían mostrar sus talentos artísticos. La feria fue todo un éxito y lograron recaudar mucho dinero para ayudar a los niños necesitados.
Pero lo más importante fue ver cómo Sofía sonreía nuevamente al saber que estaba honrando la memoria de su hermanita Valentina. A medida que pasaba el tiempo, Sofía descubrió que aunque extrañaba a Valentina, podía encontrar alegría en las pequeñas cosas de la vida.
Aprendió a valorar sus amistades, a disfrutar de los momentos presentes y a recordar siempre el amor que tenía por su hermanita.
Y así, con cada página del libro mágico y cada acto de bondad que realizaba, Sofía encontró la fuerza para superar su tristeza y seguir adelante con una sonrisa en su rostro. Porque aunque Valentina ya no estaba físicamente con ella, siempre viviría en su corazón como un recuerdo lleno de amor y felicidad.
FIN.