El regalo mágico de la Señorita Ana
Había una vez en un pequeño colegio de Argentina, una clase de inglés para niños de entre 4 y 6 años.
Los niños estaban emocionados por aprender nuevas palabras y hacer sus tareas, pero poco a poco fueron perdiendo el interés. La maestra, la Señorita Ana, se preocupaba mucho porque los niños no querían aprender. Algunos se distraían con juguetes, otros hablaban entre sí sin prestar atención a las lecciones.
La clase se volvía cada día más caótica. Un día, antes de la Navidad, la Señorita Ana decidió que debía hacer algo especial para motivar a sus alumnos. Pensó que tal vez la magia de esta época del año podría ayudarles a cambiar su actitud.
La Señorita Ana decoró el salón con luces brillantes y colgó guirnaldas navideñas en todas partes. Las ilustraciones eran coloridas y llenas de alegría. Además, preparó actividades divertidas relacionadas con la Navidad.
Cuando llegaron los niños ese día, quedaron asombrados al ver el salón tan hermoso y festivo. Sus ojos brillaban como las luces del árbol de Navidad. - ¡Wow! ¡Qué lindo está todo! - exclamó Juanito mientras miraba maravillado las decoraciones.
- Sí, es muy bonito - dijo Sofía sonriendo-. Me gusta mucho la Navidad. La Señorita Ana aprovechó ese momento para explicarles que la Navidad es una época especial donde podemos compartir amor y alegría con los demás.
Les contó que también podían aprender muchas cosas nuevas durante esta temporada. - ¿De verdad, Señorita Ana? - preguntó Mateo con curiosidad. - ¡Claro que sí! - respondió la maestra-. Y hoy vamos a aprender palabras en inglés relacionadas con la Navidad.
¿Les parece divertido? Los niños asintieron emocionados y se sentaron atentos para comenzar la lección. La maestra les enseñó palabras como "Santa Claus", —"regalo" , "árbol de Navidad" y —"reno" .
Luego, hicieron una actividad donde tenían que colorear dibujos de Santa Claus y los renos mientras repetían las palabras en inglés. Los niños estaban tan entusiasmados que no podían parar de reír y cantar.
A medida que avanzaba la clase, los niños empezaron a darse cuenta de lo divertido que era aprender nuevas palabras en inglés. Se sorprendieron al descubrir que podían comunicarse en otro idioma y eso les llenaba de orgullo. La magia de la Navidad había hecho su efecto.
Los niños ya no querían distraerse con juguetes ni hablar entre ellos durante las lecciones. Estaban ansiosos por aprender más palabras y hacer todas las tareas. Desde ese día, la clase se convirtió en un lugar lleno de alegría y aprendizaje.
Los niños siempre llegaban emocionados por descubrir algo nuevo en cada lección. Y así, gracias a la magia de la Navidad, los pequeños lograron superar sus dificultades y encontraron el gusto por aprender inglés.
La Señorita Ana estaba feliz porque sus alumnos habían encontrado el verdadero espíritu navideño: compartir amor, alegría y conocimiento. Y colorín colorado, esta historia de Navidad ha terminado. ¡Felices fiestas a todos!
FIN.