El reino de las ropas nuevas
Había una vez en un lejano reino llamado Modalandia, donde todas las personas vestían las ropas más espléndidas y maravillosas que te puedas imaginar. En Modalandia, cada año se celebraba un gran desfile de moda donde se elegía al mejor diseñador de ropa del reino.
El rey de Modalandia, el noble y sabio Rey Tejido, estaba tan enamorado de su reino que quería asegurarse de que todos estuvieran contentos con sus ropas. Un día, el Rey Tejido decidió convocar a todos los sastres del reino para un desafío especial. El desafío era crear la prenda más hermosa, elegante y única que jamás se hubiera visto en Modalandia. El ganador sería recompensado con una gran fortuna y el honor de vestir al rey en el próximo desfile de moda.
Entre los sastres que respondieron al desafío estaba un joven llamado Pedro, quien era conocido por su honestidad y creatividad. A diferencia de muchos sastres en Modalandia, Pedro no usaba telas caras ni brillantes, sino que trabajaba con materiales simples pero con mucho amor y dedicación.
Los demás sastres se burlaban de Pedro por no seguir las tendencias de la moda, pero él no les prestaba atención. Con paciencia y determinación, Pedro creó una prenda única que destacaba por su humildad y belleza natural. Al presentar su creación ante el Rey Tejido y su corte, muchos se rieron y lo menospreciaron, pero el Rey Tejido quedó impresionado por la originalidad y la sinceridad de la prenda de Pedro.
Al final del desfile, el Rey Tejido anunció que el ganador era Pedro, para sorpresa de todos. La prenda de Pedro era simplemente encantadora, y el Rey Tejido la consideraba la más hermosa de todas. La corte quedó en silencio, sin poder creer que algo tan humilde pudiera sobresalir por sobre las telas caras y brillantes.
Pedro se convirtió en el diseñador oficial del reino, y desde entonces, Modalandia comenzó a valorar la creatividad y la autenticidad por sobre las modas pasajeras. Pedro enseñó a todos que la verdadera belleza está en la honestidad, la humildad y el amor que ponemos en todo lo que hacemos.
FIN.