El rescate de Francesco
. Siempre está sonriendo y nunca pierde la oportunidad de jugar con sus amigos en el parque. Una tarde, mientras jugaba a las escondidas, Francesco se perdió en el bosque cercano al parque.
Al principio, pensó que era emocionante estar solo en medio del bosque, pero pronto se dio cuenta de que estaba perdido. Francesco comenzó a caminar sin rumbo fijo, tratando de encontrar su camino de regreso al parque.
Pero cuanto más caminaba, más se alejaba del camino correcto. Finalmente, Francesco se detuvo y miró a su alrededor para tratar de orientarse. - ¿Hola? - gritó Francesco con todas sus fuerzas - ¿Hay alguien ahí? Pero nadie respondió.
Entonces decidió seguir caminando y finalmente encontró un pequeño arroyo donde decidió sentarse y descansar por un momento.
Mientras estaba sentado allí, Francesco recordó algo importante que le había enseñado su abuelo: siempre debes tener una brújula o un mapa cuando te aventuras en lugares desconocidos. Lamentablemente, Francesco no tenía nada de eso consigo. De repente escuchó un ruido detrás de él y se dio vuelta para ver qué era. Para su sorpresa vio a una ardilla saltando entre los árboles.
- Hola pequeña ardilla - dijo Francesco - ¿Me ayudarías a encontrar mi camino de regreso al parque? La ardilla parecía entender lo que le pedía porque comenzó a correr por el bosque mientras Francesco la seguía.
Después de unos minutos llegaron a una clara donde había una cabaña abandonada. La ardilla se detuvo y señaló hacia la cabaña. - ¿Debería entrar allí? - preguntó Francesco. La ardilla asintió con la cabeza y Francesco entró en la cabaña.
Adentro, encontró una brújula y un mapa que le ayudaron a encontrar el camino de regreso al parque. Cuando finalmente llegó al parque, sus amigos estaban muy preocupados por él.
Pero Francesco les contó su aventura en el bosque y cómo había encontrado el camino de regreso gracias a una pequeña ardilla amable. Desde ese día, Francesco siempre lleva consigo una brújula o un mapa cuando sale a explorar lugares nuevos.
Y nunca olvida lo importante que es pedir ayuda cuando te encuentras perdido. La historia de Francesco inspira a los niños a ser valientes e ingeniosos cuando se enfrentan a situaciones difíciles.
También enseña la importancia de estar preparados para cualquier situación y no tener miedo de pedir ayuda cuando sea necesario.
FIN.