El rescate de Kevin y Ody



Había una vez un hombre llamado Kevin que vivía en un pequeño pueblo rodeado de montañas y bosques. Un día, mientras paseaba por el parque, escuchó unos ladridos provenientes de un arbusto cercano.

Con curiosidad, se acercó y descubrió a un hermoso perro blanco con manchas negras. - ¡Hola amiguito! ¿Cómo estás? -saludó Kevin con una sonrisa. El perro movió la cola emocionado y se acercó a oler la mano de Kevin.

En ese momento, el hombre notó que en su collar tenía grabado el nombre —"Ody" . - Ody, ese será tu nombre entonces. ¿Quieres venir conmigo? -preguntó Kevin acariciando al perro. Ody asintió con entusiasmo y juntos emprendieron el regreso a casa de Kevin.

Desde ese día, se volvieron inseparables compañeros de aventuras. Ody resultó ser muy inteligente y cariñoso, siempre dispuesto a jugar y aprender cosas nuevas. Una tarde soleada, mientras caminaban por el bosque, escucharon unos gritos desesperados cerca del río.

Se acercaron corriendo y vieron a un niño en apuros tratando de mantenerse a flote en el agua turbulenta. - ¡Ayuda! ¡Por favor ayuda! -gritaba el niño agitando los brazos.

Kevin no dudó ni un segundo y sin pensarlo dos veces se lanzó al agua para rescatar al pequeño. Con esfuerzo logró llegar hasta él y lo llevó sano y salvo a la orilla donde Ody los esperaba ansioso.

- ¡Gracias señor! ¡Gracias por salvarme! -dijo el niño entre lágrimas abrazando a Kevin. - No hay de qué, solo hice lo que cualquier persona haría en mi lugar -respondió humildemente Kevin secándose las manos mojadas en su pantalón-.

Y gracias también a ti, Ody, por estar siempre atento y acompañarnos en esta misión de rescate. Ody movió la cola feliz sintiéndose parte importante de aquella hazaña heroica.

Desde ese día, la historia del valiente rescate se difundió por todo el pueblo convirtiendo a Kevin y Ody en héroes locales admirados por todos. Con el tiempo, Kevin comprendió que no importa cuán grande o pequeño seas, siempre puedes marcar la diferencia si actúas con valentía y bondad hacia los demás.

Y así, entre risas y travesuras cotidianas junto a su fiel amigo Ody, siguieron viviendo mil aventuras más llenas de amor y amistad inquebrantable.

FIN.

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