El rescate de Rayito
Había una vez en un mágico bosque de colores brillantes y árboles gigantes, vivía Corazón, un pequeño conejito muy valiente y curioso.
Corazón siempre estaba rodeado de sus amigos del bosque: Tita la ardilla, Pipo el zorro y Luna la mariposa. Juntos pasaban sus días explorando, jugando y aprendiendo cosas nuevas. Un día, mientras jugaban cerca del río cristalino que cruzaba el bosque, escucharon unos sonidos extraños provenientes de lo profundo del bosque.
Curiosos, decidieron adentrarse en busca de la fuente de esos ruidos misteriosos. Mientras caminaban entre los altos árboles y las coloridas flores, se encontraron con una pequeña cría de ciervo atrapada en un arbusto espinoso.
"¡Oh no! ¡Pobre ciervito! ¿Qué podemos hacer para ayudarlo?" exclamó Luna preocupada. Corazón se acercó con valentía al ciervo y con cuidado logró liberarlo del arbusto sin lastimarlo. El pequeño animal asustado miró a los amigos del bosque con gratitud en sus ojos brillantes.
"¡Gracias por salvarme! Me llamo Rayito y me perdí de mi mamá en este gran bosque", dijo el ciervo con voz temblorosa. Los amigos se miraron entre sí y decidieron ayudar a Rayito a encontrar a su mamá.
Así comenzó una emocionante aventura llena de obstáculos y desafíos que debían superar juntos para llegar al otro lado del bosque donde vivía la familia de Rayito.
Durante el viaje, enfrentaron peligros como un río caudaloso que debían cruzar juntos agarrados de las manos para no ser arrastrados por la corriente, un puente roto que tuvieron que reconstruir utilizando ramas y hojas, e incluso una cueva oscura donde debieron confiar en su amistad y valentía para seguir adelante.
Finalmente, luego de pasar por todas esas pruebas difíciles pero superándolas gracias a su trabajo en equipo y amor entre ellos; llegaron al claro donde vivía la familia de Rayito.
La mamá cierva recibió a su hijo con lágrimas de alegría y abrazó a Corazón y sus amigos como muestra de gratitud por haberlo traído sano y salvo. "¡Gracias amigos por todo lo que hicieron por mi hijo! Siempre estaré agradecida con ustedes", dijo la mamá cierva emocionada.
Corazón sonrió feliz al ver reunida a toda la familia cierva junta nuevamente gracias a su valentía e amor incondicional hacia los demás.
En ese momento entendió que no importa cuán grande sean los desafíos si se enfrentan juntos con coraje y solidaridad todo es posible. Y así terminó esta increíble aventura en el mágico bosque donde Corazón siempre supo que estará junto a sus amigos porque "Corazón siempre estaré contigo te amo".
FIN.