El rescate de Tini

Roma estaba muy emocionada por llevar a pasear a Tini, el perrito de sus abuelos. Era un día soleado y perfecto para salir al parque. Tini estaba muy contento también, moviendo su cola y ladrando de emoción.

- ¡Vamos Tini! - dijo Roma mientras caminaban hacia el parque. Cuando llegaron al parque, Tini comenzó a olfatear todo lo que encontraba en su camino. Roma se reía al ver cómo su pequeño amigo disfrutaba tanto del paseo.

Pero de repente, la correa de Tini se enredó en un árbol y se soltó. El perrito salió corriendo asustado sin mirar atrás. - ¡Tini! ¡TINI! - gritaba Roma tratando de detenerlo, pero era demasiado tarde.

Roma comenzó a llorar desesperada mientras buscaba a Tini por todo el parque. Preguntó a todas las personas que encontraba si habían visto a su perro, pero nadie parecía haberlo visto.

Pasaron horas buscando hasta que finalmente decidieron irse a casa con el corazón roto y llenos de tristeza. Sin embargo, al día siguiente recibieron una llamada inesperada. Era una señora mayor que había encontrado a Tini vagando por la calle cerca del parque.

Lo llevó consigo y lo cuidó durante toda la noche hasta poder encontrarlos gracias al collar con los datos de contacto que tenía puesto. Roma y su familia estaban tan felices de tener nuevamente a Tini en casa sano y salvo.

Pero aprendieron una gran lección: siempre debían estar atentos y cuidar a su mascota en todo momento. - Nunca más te soltaré de la correa, Tini - dijo Roma mientras abrazaba a su amigo animal. Desde ese día, Roma y Tini se volvieron inseparables.

Siempre salían juntos al parque, pero esta vez con mucho más cuidado y atención para evitar cualquier accidente o problema similar.