El rescate del delfín marino
Había una vez un niño llamado Juanito, que vivía cerca de la costa en un pequeño pueblo argentino. A Juanito le encantaba pasar sus días explorando la playa y el mar. Siempre estaba ansioso por descubrir algo nuevo.
Un día, mientras caminaba por la orilla del mar, Juanito encontró algo inusual. ¡Era un delfín varado en la arena! El corazón de Juanito se llenó de tristeza al ver al pobre animal luchando por volver al agua.
Sin pensarlo dos veces, Juanito corrió hacia el delfín y comenzó a empujarlo con todas sus fuerzas. Pero no importaba cuánto intentara, el delfín simplemente no podía moverse lo suficiente para llegar al agua.
Juanito sabía que necesitaba ayuda adicional, así que corrió hacia su casa y buscó a su abuelo. "-¡Abuelo! ¡Ven rápido! ¡Hay un delfín varado en la playa!"El abuelo de Juanito era un hombre sabio y amante de los animales.
Él entendió inmediatamente lo grave de la situación y juntos regresaron rápidamente a la playa. El abuelo observó cuidadosamente al delfín e ideó un plan ingenioso para rescatarlo. "-Juanito, necesitaremos reunir a algunas personas para ayudarnos", dijo el abuelo con calma.
Rápidamente, ellos corrieron por el pueblo gritando: "-¡Ayuda! ¡Necesitamos tu ayuda para salvar a este delfín!" Pronto, muchos vecinos se sumaron a ellos y todos juntos formaron una cadena humana frente al delfín.
Con mucho cuidado y trabajo en equipo, lograron empujar al delfín más cerca del agua. Pero justo cuando parecía que el rescate estaba cerca de ser exitoso, una ola gigante se acercó rápidamente hacia ellos. Todos se asustaron y corrieron para ponerse a salvo.
Juanito miró con tristeza cómo el delfín era arrastrado aún más lejos de la orilla por la ola. "-¡No podemos rendirnos! ¡Tenemos que salvarlo!" gritó valientemente mientras corría hacia el agua.
Sin pensarlo dos veces, Juanito nadó con todas sus fuerzas hasta donde estaba el delfín. Agarrándolo suavemente, lo empujó con todas sus fuerzas contra la corriente de la ola.
Los vecinos vieron lo valiente que era Juanito y decidieron unirse nuevamente a él en su esfuerzo por rescatar al delfín. Juntos formaron una cadena humana aún más fuerte y finalmente lograron llevar al delfín de vuelta al mar seguro. El delfín nadaba felizmente en las aguas mientras todos celebraban su liberación.
La playa se llenó de aplausos y alegría por el heroico acto de Juanito y los vecinos solidarios. Desde ese día en adelante, Juanito se convirtió en un héroe local y fue admirado por todos los niños del pueblo.
Pero lo más importante, aprendió una lección valiosa: nunca subestimes el poder del trabajo en equipo y la importancia de ayudar a los animales necesitados.
Y así, gracias a la bondad y determinación de un niño llamado Juanito, el delfín pudo volver a su hogar en el océano, donde pertenecía.
FIN.