El rescate del zorro
. Era un día soleado y la familia estaba muy contenta de salir a disfrutar del aire libre.
Tomas se subió a su bicicleta roja con rueditas y pedaleó junto a su hermana, mientras sus padres caminaban detrás de ellos. La plaza estaba llena de niños jugando, perros correteando y personas haciendo ejercicio. De repente, Tomas vio un camino de tierra que conducía hacia el bosque cercano.
Él siempre había querido explorar ese lugar pero nunca antes había tenido la oportunidad. "¡Mamá, papá! ¿Podemos ir al bosque? ¡Quiero ver qué hay allí!", preguntó emocionado.
Los padres se miraron preocupados por el peligro que pudiera haber en el bosque pero finalmente decidieron permitirle explorar un poco bajo su supervisión. Así que toda la familia siguió a Tomas por el camino de tierra hasta llegar al borde del bosque. Allí encontraron una pequeña cabaña abandonada que parecía haber estado vacía durante mucho tiempo.
Tomas se acercó a la puerta y trató de abrirla, pero estaba cerrada con llave. Entonces decidió buscar una forma de entrar por otra parte y comenzó a explorar los alrededores.
Después de unos minutos buscando, encontró una ventana rota en uno de los costados de la cabaña. Se asomó para ver si podía entrar y notó algo extraño dentro: una luz brillante emitida desde algo metálico brillante en el centro del cuarto oscuro.
"¡Papá, mamá! ¡Hay algo raro adentro! ¡Vengan rápido!", exclamó Tomas emocionado. La familia se acercó y, después de mirar por la ventana rota, decidieron que era mejor no entrar en la cabaña abandonada.
Pero esto no desanimó a Tomas, quien decidió seguir explorando el bosque en busca de aventuras. Mientras pedaleaban por el sendero, escucharon un ruido extraño proveniente del otro lado del bosque. Era como si alguien estuviera llorando. "¿Qué es ese ruido?", preguntó la hermana de Tomas con preocupación.
"No lo sé", respondió su padre. "Pero debemos ir a investigar". Así que toda la familia siguió el sonido hasta llegar a una pequeña laguna rodeada de árboles. Allí encontraron a un pequeño zorro atrapado en una trampa para animales.
"¡Oh no! ¡El pobrecito está lastimado!", exclamó la madre de Tomas. Tomas rápidamente le ofreció al zorro agua y comida mientras su padre intentaba liberarlo de la trampa.
Después de varios minutos luchando, finalmente logró soltar al animalito y lo dejaron libre en el bosque otra vez. "Tomas, hiciste algo muy valiente hoy", dijo su mamá orgullosa mientras abrazaba al niño. "Exploraste nuevas áreas y ayudaste a un ser vivo necesitado".
Tomas sonrió feliz sabiendo que había hecho algo bueno por alguien más y aprendido una valiosa lección sobre cuidar del medio ambiente y los animales salvajes.
Y así termina esta historia infantil llena de aventura y enseñanza para todos los niños que quieran salir a explorar el mundo que les rodea.
FIN.