El Río Limpio

Había una vez un hermoso río llamado "El Río de los Perros". Este lugar era el hogar de muchos animales, como patos, peces y ranas. Todos vivían en armonía y disfrutaban de las aguas cristalinas del río.

Un día, algo terrible sucedió. Los humanos comenzaron a arrojar basura al río. Botellas vacías, bolsas de plástico y latas contaminaron el agua que antes era pura y limpia.

Los animales se alarmaron al ver cómo su hogar se volvía cada vez más sucio y peligroso. Uno de los patos llamado Lucas decidió hacer algo al respecto. Se reunió con sus amigos, la rana Rita y el pez Pablo, para buscar una solución.

Juntos idearon un plan para limpiar el río y salvar a todos los animales que vivían allí. "¡Amigos! No podemos quedarnos de brazos cruzados mientras nuestro hogar se contamina", dijo Lucas con determinación. "Tienes razón, Lucas", respondió Rita.

"Debemos actuar rápido antes de que sea demasiado tarde". "Pero ¿cómo vamos a lograrlo?", preguntó Pablo con preocupación. Los tres amigos decidieron pedir ayuda a los demás animales del río.

Organizaron una reunión donde explicaron la situación y pidieron colaboración para limpiar el río juntos. Para sorpresa de Lucas, Rita y Pablo, todos los animales se mostraron dispuestos a ayudar.

Formaron equipos para recolectar la basura del río e incluso crearon señales para advertir a los humanos sobre las consecuencias negativas de la contaminación. Con el paso del tiempo, el río comenzó a recuperar su belleza original. Las aguas volvieron a ser cristalinas y los animales pudieron nadar y jugar sin preocupaciones.

El esfuerzo de Lucas, Rita, Pablo y todos los demás animales demostró que unidos pueden lograr grandes cosas. Los humanos también se dieron cuenta del daño que estaban causando y comenzaron a cuidar mejor el río. "¡Gracias por ayudarnos a salvar nuestro hogar!", exclamó Lucas emocionado.

"No hay de qué", respondió Rita con una sonrisa. "Juntos somos más fuertes". "Así es", dijo Pablo. "Aprendimos que debemos cuidar nuestro entorno para poder vivir en armonía".

Desde aquel día, el Río de los Perros se convirtió en un lugar limpio y seguro para todos los animales. Lucas, Rita y Pablo se convirtieron en héroes para sus amigos y recordaron la importancia de proteger la naturaleza.

Y así termina esta historia, enseñándonos que cada pequeña acción cuenta cuando se trata de cuidar nuestro planeta. Si todos nos unimos, podemos lograr grandes cambios y asegurar un futuro mejor para todos los seres vivos que comparten este hermoso mundo con nosotros.