El robot doctor resucita la sonrisa

En un futuro no muy lejano, en una ciudad llamada Tecnópolis, vivía un niño llamado Tomás. Un día, Tomás se enfermó y tuvo que ir al hospital.

Para su sorpresa, en vez de ser atendido por un médico humano, lo recibió un robot doctor llamado Doc. Al principio, Tomás estaba un poco asustado, pero Doc le explicó que estaba programado para cuidar y ayudar a los niños a sentirse mejor.

Con su voz amigable y luces parpadeantes, Doc hizo que la visita al hospital fuera menos aterradora para Tomás. Durante su estadía, Doc contó cuentos, jugó juegos y hasta cantó canciones para levantar el ánimo de Tomás y los demás pequeños pacientes.

Aprendió acerca de la importancia de la empatía y de escuchar a los demás. Un día, un apagón afectó a la ciudad y dejó sin energía a Doc.

Sin embargo, Tomás y sus amigos se unieron para encontrar una solución, y descubrieron que la energía del cariño y la amistad era más poderosa que cualquier batería. Juntos lograron recargar a Doc y devolverle la energía para seguir ayudando a los niños.

Desde entonces, Doc se convirtió en el héroe de Tecnópolis, llevando alegría y cuidados a todos los niños que lo necesitaban.