El secreto de la bruja del bosque

Había una vez dos hermanitos, Juan y María, que se perdieron en el profundo bosque mientras jugaban. Mientras buscaban el camino de regreso a casa, se toparon con una misteriosa casa cubierta de enredaderas y rodeada de árboles retorcidos. Decidieron acercarse para pedir ayuda.

Al tocar la puerta, esta se abrió lentamente y una anciana con sombrero puntiagudo les dio la bienvenida. 'Soy la bruja del bosque', dijo la anciana con una sonrisa amable. Los hermanitos, asombrados, le contaron su problema. La bruja les ofreció ayudar, pero a cambio les pidió realizar tres tareas: encontrar unas hierbas mágicas, recoger bayas de un arbusto encantado y resolver un acertijo.

Determinados a regresar a casa, Juan y María aceptaron el desafío. En su búsqueda, descubrieron que la amable bruja ayudaba a todos los seres del bosque con sus habilidades mágicas. Completaron con éxito las tareas y regresaron con la bruja, quien les reveló el camino de vuelta a casa. Les explicó que el verdadero poder de la magia está en ayudar a los demás y que la amabilidad y la valentía pueden superar cualquier obstáculo. Con lágrimas en los ojos, los hermanitos agradecieron a la bruja y emprendieron el camino de regreso a casa, llevando consigo el valioso aprendizaje que les había enseñado.

Desde ese día, Juan y María se convirtieron en valientes exploradores del bosque, ayudando a los demás con la sabiduría que la bruja les había transmitido.