El secreto de la escuela limpia

En la Escuela Primaria "Estrellitas Brillantes", en un pequeño pueblo de Argentina, vivía un niño llamado Facundo. Facu, como le decían cariñosamente sus amigos, era curioso y siempre estaba buscando aventuras. Un día, mientras jugaba en el patio de la escuela, vio cómo un grupo de compañeros tiraba papeles y envoltorios de golosinas en el suelo.

Facu se acercó y les dijo: "¡Chicos, no tiren basura en el suelo! Nuestra escuela es hermosa y hay que cuidarla". Los compañeros rieron y le dijeron que no importaba, que los barrenderos se encargarían de limpiar. Eso entristeció a Facu, quien decidió hacer algo al respecto.

Esa tarde, en su casa, Facu le contó a su mamá lo que había visto en la escuela. Ella le explicó por qué era importante cuidar el medio ambiente y mantener limpio el lugar donde estudian. Facu se sintió motivado y decidió buscar una solución.

Al día siguiente, antes de que comenzaran las clases, Facu se paró frente a sus compañeros y les propuso hacer un concurso. "Vamos a ver quién es capaz de recoger más basura del patio en cinco minutos", les dijo emocionado. Todos aceptaron el desafío, y en pocos minutos, el patio lucía mucho más limpio. Facu les explicó que, si todos colaboraban, la escuela estaría mucho más bonita y que era responsabilidad de todos mantenerla así.

Los días pasaron, y Facu siguió con su misión de concientizar a sus compañeros sobre la importancia de mantener limpia la escuela. Pronto, todos comenzaron a tirar la basura en los cestos y a cuidar el lugar. Un día, la directora de la escuela los llamó a todos al patio. Estaba sorprendida y emocionada por el cambio que había visto. Les agradeció y les dijo que habían logrado algo muy importante juntos.

Facu se sentía feliz de haber logrado su objetivo, y desde entonces, la Escuela Primaria "Estrellitas Brillantes" se convirtió en un lugar limpio, donde todos cuidaban y valoraban su entorno. Facu entendió que, con esfuerzo y con ejemplo, se puede lograr un cambio positivo en la comunidad.