El secreto de la tormenta

Era una tarde de primavera, el cielo se oscureció de repente y una tormenta estalló con furia sobre el campo. La niña, asustada, se refugió bajo un árbol, pero el viento y la lluvia la despertaron abruptamente.

Al abrir los ojos, se encontró tendida sobre la hierba empapada. - ¡Oh no, la tormenta me ha atrapado! - pensó la niña con preocupación.

Decidió buscar refugio y comenzó a caminar por el bosque, con la esperanza de encontrar una cueva o alguna choza donde resguardarse. Sin embargo, mientras avanzaba, se dio cuenta de que la naturaleza a su alrededor parecía estar sufriendo. Los árboles se sacudían con fuerza, las aves buscaban refugio y los animales se escondían.

Intrigada, la niña decidió detenerse y observar con atención lo que sucedía. Fue entonces cuando escuchó un susurro proveniente del viento. - Niña valiente, la respuesta que buscas está en el corazón de la tormenta - dijo el viento en un tono misterioso.

Confundida pero decidida, la niña siguió adelante hasta llegar a un claro en medio del bosque, donde la tormenta rugía con más fuerza que nunca.

En ese momento, recordó las palabras del viento y se armó de valor para adentrarse en la furia de la tormenta. Con cada paso, el viento y la lluvia parecían desafiarla, pero la niña continuó avanzando con determinación. Finalmente, llegó al centro de la tormenta, donde todo se volvió silencioso.

En ese instante, la niña entendió el mensaje de la naturaleza. La tormenta representaba los desafíos y obstáculos de la vida, y en su corazón encontró la fortaleza para enfrentarlos.

Con esta revelación, la niña salió de la tormenta y regresó al campo, donde la lluvia comenzó a disminuir y el sol asomó entre las nubes. Con una sonrisa en el rostro, la niña se dispuso a cuidar y proteger la naturaleza, sabiendo que su corazón era más fuerte que cualquier tormenta.