El secreto de las galletas de la abuela



Tomás estaba emocionado porque iba a participar en un concurso de cocina en la escuela. Quería demostrar que podía hacer las galletas más deliciosas del mundo, pero se encontró con un problema: cuando le pidió a su abuela la receta secreta, ella le dijo que necesitaba usar números decimales.

"Abuela, ¿qué son esos números decimales? No entiendo nada de eso", le dijo Tomás con frustración.

Su abuela, una mujer sabia y amorosa, le explicó que los números decimales son una forma de representar partes de un número. Le dio ejemplos sencillos, como dividir una barra de chocolate en diez partes iguales, y cada parte sería una décima. Tomás se confundió un poco, pero su abuela le aseguró que era más simple de lo que parecía.

Aun con la explicación de su abuela, Tomás seguía teniendo problemas para entenderlo por completo, así que decidió pedir ayuda a su maestro de matemáticas, el Sr. González.

"Sr. González, no entiendo los números decimales y necesito utilizarlos para la receta de las galletas de mi abuela. ¿Puede ayudarme?", le preguntó Tomás con timidez.

El maestro, con su gran paciencia, le explicó que los números decimales son una forma de representar las partes iguales de un entero, que la coma separa la parte entera de la decimal, y que las cifras después de la coma representan las décimas y centésimas. También le mostró cómo podrían utilizar los números decimales en la receta de las galletas.

Armado con este nuevo conocimiento, Tomás se puso manos a la obra y siguió la receta al pie de la letra, asegurándose de no cometer errores con los números decimales. Después de hornear las galletas, el aroma dulce invadió la casa.

El día del concurso, todos probaron las galletas de Tomás y los jueces quedaron impresionados. "Estas son las mejores galletas que hemos probado en mucho tiempo", dijeron emocionados.

Tomás ganó el concurso de cocina y su abuela estaba muy orgullosa. Se dio cuenta de que los números decimales no eran tan complicados como parecían, y que gracias a su abuela y al maestro, pudo entenderlos y demostrar su talento en la cocina.

Desde ese día, Tomás se convirtió en el experto en galletas de su escuela, y sus compañeros siempre le pedían consejos para cocinar. Y todo gracias al secreto de las galletas de su abuela, y la ayuda del Sr. González con los números decimales.

FIN.

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