El secreto de las semillas mágicas
En el jardín de la escuela 189 Clelio P. Villaverde, todos los niños estaban emocionados por celebrar el Día del Jardincito. Mercedes, una niña curiosa y amante de las plantas, se preguntaba qué regalo especial podría llevar al jardín.
Decidió preguntarle a su abuelo, quien le contó la leyenda de las semillas mágicas. Según la historia, estas semillas tenían el poder de hacer crecer las plantas más hermosas y fuertes.
Así que Mercedes pidió a su abuelo que le enseñara dónde encontrar esas semillas. "¿Estás segura de querer buscarlas, Mercedes?", preguntó el abuelo. "Sí, abuelo. Quiero que nuestro jardincito sea el más especial de todos", respondió Mercedes con determinación.
Juntos, se adentraron en el misterioso Bosque Encantado, donde se decía que crecían las semillas mágicas. Allí, se encontraron con el hada Flora, guardiana del bosque, quien les dio una misión: encontrar las tres piedras preciosas escondidas en el bosque para demostrar su valentía.
Mercedes y su abuelo aceptaron el desafío y, con astucia e ingenio, superaron las pruebas y obtuvieron las tres piedras. Al regresar con el hada Flora, esta les entregó un saquito con las semillas mágicas. De vuelta en la escuela, Mercedes compartió las semillas con sus compañeros.
Juntos sembraron las semillas mágicas en el jardín, regándolas con amor y cuidado. Con el paso de los días, las plantas comenzaron a crecer de manera asombrosa, llenando el jardín de colores y aromas maravillosos. El jardincito 189 Clelio P.
Villaverde se convirtió en el más hermoso de todos, gracias al esfuerzo y la valentía de Mercedes y sus amigos.
FIN.