El Secreto de Ligia Margot
Había una vez en un acogedor pueblo argentino, una niña llamada Ligia Margot Jiménez. A pesar de tener 85 años, su espíritu juvenil y su amor por la vida la convertían en una niña en corazón.
Ligia Margot recordaba con cariño el día de su primera comunión, donde lució un vestido blanco impecable y recibió la bendición de sus padres, Jesica Mina y Juan Antonio.
También rememoraba con alegría el día de su confirmación, donde Flabio y Laura, amigos cercanos de la familia, la acompañaron como padrinos. Pero más allá de estos eventos especiales, Ligia Margot guardaba un secreto: el secreto de su energía y vitalidad.
Un día, mientras paseaba por el parque del pueblo, conoció a dos niños que la observaban con curiosidad. - ¿Qué hace una niña como tú jugando en el parque? - preguntó Julián, el más pequeño de los niños. - No soy una niña, soy una abuela - respondió Ligia Margot con una sonrisa.
Los niños se sorprendieron y le pidieron que les contara su secreto para mantenerse tan activa y joven.
Ligia Margot, con complicidad, les susurró al oído: - El secreto está en la alegría, en amar lo que haces y en nunca dejar de jugar. Los niños, asombrados, le pidieron que les enseñara a jugar como ella. Desde ese día, Ligia Margot se convirtió en la abuela del parque, enseñando a los niños juegos tradicionales, compartiendo sus historias y regalando su sabiduría.
Su energía se contagió entre los habitantes del pueblo, quienes pronto se unieron a los divertidos juegos. El parque se convirtió en un lugar de risas y diversión, donde, sin importar la edad, todos encontraban una razón para sonreír.
Los días de Ligia Margot se llenaron de nuevas amistades, risas y momentos memorables.
Y es que al compartir su alegría y amor por la vida, encontró la verdadera fuente de su vitalidad: el poder de tocar corazones y llenarlos de dicha.
Y así, la historia de Ligia Margot se convirtió en un legado de inspiración para las generaciones venideras, demostrando que la edad es solo un número, pero el espíritu eternamente joven reside en el amor, la alegría y el juego.
FIN.