El secreto de los árboles y los niños

Había una vez en un pequeño pueblo rodeado de hermosos árboles, vivían dos niños llamados Tomás y Sofía. Un día, mientras jugaban en el bosque, escucharon un susurro proveniente de un viejo árbol.

Intrigados, se acercaron y el árbol les dijo: "Niños, tengo un secreto que contarles. Nosotros, los árboles, tenemos la capacidad de hablar y pensar, y hemos estado observando cómo cuidan y disfrutan de la naturaleza". Los niños, asombrados, prometieron guardar el secreto.

Desde ese día, Tomás y Sofía comenzaron a pasar más tiempo con los árboles, aprendiendo sobre la importancia de cuidar el medio ambiente y respetar la naturaleza. Un día, un grupo de leñadores llegó al bosque con la intención de talar los árboles.

Alarmados, los niños corrieron a contarles a los árboles lo que estaba por suceder. Los árboles, solidarios, se unieron para proteger el bosque. Movieron sus ramas y susurros de viento crearon una gran barrera que detuvo a los leñadores.

Impresionados, los leñadores decidieron no talar los árboles y se unieron a la causa de conservación del bosque. Desde ese día, los niños y los árboles se convirtieron en grandes defensores de la naturaleza, enseñando a todos la importancia de cuidar nuestro planeta.