El secreto de Rodolfo, el Ratón Pérez

Rodolfo, el Ratón Pérez, era conocido por su incansable labor de recoger los dientes caídos de los niños. Sin embargo, detrás de su graciosa sonrisa, Rodolfo guardaba un secreto: sus propios dientes estaban descuidados.

Un día, mientras recogía un diente en una casa, escuchó a un niño decir: "No quiero que venga el Ratón Pérez, me da miedo que se lleve mis dientes sucios". Estas palabras lo hicieron reflexionar.

Decidió visitar a la hada de los dientes, quien le explicó la importancia de la higiene bucal. Con el consejo de la hada, Rodolfo empezó a cepillarse los dientes como nunca lo había hecho. Pronto, brillaban como estrellas y se sentía seguro de sí mismo.

Los niños, al ver su reluciente sonrisa, ya no temían entregarle sus dientes. Rodolfo se convirtió en un ejemplo, enseñando a los niños sobre la importancia de cuidar sus dientes.

Desde entonces, cada vez que dejaba una moneda bajo la almohada, dejaba también un mensaje recordando la importancia de cepillarse los dientes. Su labor se convirtió en un símbolo de higiene dental para todos los niños.