El secreto del juego fuerte

Era un soleado día en la casa de los Heeler y Bluey y Bingo estaban emocionadas por jugar al aire libre.

Papá Heeler les dijo: "Chicas, antes de que salgan a jugar, recuerden que es importante descansar y alimentarse bien para estar fuertes". Las pequeñas perritas asintieron con entusiasmo y corrieron hacia la mesa para almorzar. "Mmm, brócoli, zanahorias y pollo, comida sana para estar fuertes", dijo Mamá Heeler. Luego de comer, las hermanitas se echaron una siesta para descansar.

Cuando despertaron, estaban llenas de energía, listas para jugar. "¡Vamos a la plaza!", gritó Bluey. En la plaza, las pequeñas perritas corrieron, saltaron y se divirtieron muchísimo.

De repente, el perro Rusty se les acercó, pero notaron que parecía cansado y débil. "¿Qué te pasa, Rusty?", preguntó Bluey. "No comí muy bien hoy y no tomé una siesta", respondió Rusty. Las hermanitas Heeler le explicaron la importancia de descansar y alimentarse sano para estar fuertes.

Rusty les agradeció y prometió cuidar más su alimentación y descanso. Juntos siguieron jugando y pasaron una tarde maravillosa. De regreso en casa, Papá y Mamá Heeler elogiaron a Bluey y Bingo por recordar el secreto de estar fuertes.

Las pequeñas perritas se acostaron felices, sabiendo que descansar y alimentarse bien las hacía fuertes para jugar y divertirse todos los días.