El secreto detrás de la pared
Letito era un bebé muy activo y curioso, siempre estaba explorando y descubriendo cosas nuevas.
Pero un día se despertó con muchos granitos en su cuerpo y su mamá le dijo que tenía varicela, por lo que no podría ir al colegio por unos días. Letito se sintió triste porque le gustaba mucho ir a jugar con sus amigos, pero su mamá le explicó que debía quedarse en casa para no contagiar a los demás niños.
Así que decidió aprovechar el tiempo para jugar en su habitación y leer algunos cuentos. Pero mientras jugaba, Letito notó algo extraño en la pared de su habitación. Había un pequeño agujero que antes no estaba allí.
Decidió investigar, así que tomó una linterna y se asomó por el agujero. - ¿Qué hay ahí adentro? -preguntó Letito curioso. Para sorpresa de Letito, encontró un pequeño pasadizo secreto detrás de la pared.
Con mucho cuidado, comenzó a explorarlo hasta llegar a una habitación oculta llena de objetos antiguos y misteriosos. - ¡Guau! Esto es increíble -exclamó Letito emocionado-. ¡Nunca había visto algo así! Mientras seguía explorando la habitación secreta, encontró una caja cerrada con llave.
Pero como era solo un bebé, no sabía cómo abrirla. Así que decidió pedir ayuda a su hermana mayor Ana. Ana también estaba sorprendida cuando vio la habitación secreta detrás del agujero en la pared.
Y cuando vio la caja cerrada con llave, decidió ayudar a Letito a abrirla. Después de mucho intentarlo, finalmente encontraron la llave y abrieron la caja. Dentro encontraron un diario antiguo que pertenecía al bisabuelo de su mamá. - ¡Mira esto! -exclamó Ana emocionada-.
¡Es el diario del bisabuelo! Letito y Ana comenzaron a leer el diario juntos. Descubrieron historias fascinantes sobre la vida de su bisabuelo, sus aventuras en una expedición por la selva y los lugares más exóticos que había visitado.
Finalmente, llegaron a una página donde su bisabuelo hablaba sobre lo importante que es explorar y descubrir cosas nuevas en la vida. Y Letito se dio cuenta de que eso era exactamente lo que estaba haciendo en ese momento.
- Gracias Ana por ayudarme -dijo Letito sonriendo-. Este ha sido uno de los días más divertidos de mi vida. Así terminó la aventura de Letito el bebé con varicela.
Aprendió que aunque algunas situaciones pueden parecer desagradables al principio, siempre hay algo positivo detrás si sabemos buscarlo. Y además descubrió un misterio emocionante junto a su hermana mayor.
FIN.