El sueño de Berni


Había una vez un pequeño niño llamado Berni que soñaba con ser un gran jugador de fútbol. Desde muy chiquito, siempre jugaba con su pelota en el parque y se imaginaba jugando en los estadios más grandes del mundo.

Un día, Berni recibió la noticia de que había sido seleccionado para jugar en la final del mundial.

¡Estaba tan emocionado que no podía creerlo! Sin embargo, también estaba muy asustado porque sabía que iba a tener que enfrentarse a los mejores jugadores del mundo. "¿Qué voy a hacer? ¿Cómo voy a ganarles?" -se preguntaba Berni mientras practicaba sus tiros al arco. Pero entonces, un día antes del partido, algo extraordinario sucedió.

Mientras caminaba hacia el estadio para entrenar con su equipo, se encontró con un anciano sabio sentado en un banco. "Hola joven, ¿qué te preocupa tanto?" -le preguntó el anciano amablemente. "Mañana juego la final del mundial y estoy muy nervioso.

No sé si podré ganar" -respondió Berni con tristeza. El anciano sonrió y le dijo: "Berni, déjame contarte una historia". Y así comenzó:"Hace muchos años atrás, había un pequeño pueblo donde todos los habitantes eran pescadores.

Un día llegó al pueblo un hombre rico y les ofreció comprar todo el pescado que pudieran pescar por tres veces más de lo que valía en el mercado. "Los habitantes se emocionaron mucho e inmediatamente salieron a pescar todo lo posible.

Pero cuando regresaron al puerto con sus botes llenos, descubrieron que el hombre rico había mentido y no les iba a pagar lo prometido. "¿Qué hicieron entonces?" -preguntó Berni ansioso por saber el final de la historia.

El anciano sonrió y respondió: "En vez de enojarse o rendirse, decidieron unirse y construir su propio mercado en el pueblo. De esa forma, podían vender su pescado a precios justos sin depender de los engaños del hombre rico".

Berni entendió la moraleja de la historia: que cuando las cosas parecen difíciles, es mejor unirse y buscar una solución juntos en vez de rendirse. Al día siguiente, Berni entró al campo con más confianza que nunca antes.

Y aunque tuvo algunos momentos difíciles durante el partido, siempre recordaba las palabras del anciano sabio y se mantuvo firme junto a sus compañeros.

Finalmente, después de un partido muy emocionante, ¡el equipo de Berni ganó la final del mundial! Todos saltaron y gritaron juntos mientras celebraban su victoria. Pero lo más importante fue que aprendieron una valiosa lección sobre trabajar juntos como equipo para lograr grandes cosas.

Desde ese día en adelante, Berni siempre recordaría la historia del pueblo pescador cada vez que enfrentara una situación difícil. Y así se convirtió en uno de los mejores jugadores de fútbol del mundo gracias a su perseverancia y trabajo duro junto a sus compañeros.

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