El sueño de Juan
Había una vez un niño llamado Juan que siempre había soñado con tener su propio auto.
Un día, mientras caminaba por la calle, vio el auto perfecto estacionado frente a su casa: ¡era un hermoso deportivo rojo! Juan se acercó al dueño del auto, Facundo, y le preguntó si estaría dispuesto a vendérselo. Pero Facundo respondió:"Lo siento mucho, pero este auto es muy especial para mí. No puedo venderlo". Juan estaba muy decepcionado.
¿Cómo podría conseguir su tan ansiado primer auto? Pero Juan no se rindió tan fácilmente. Decidió investigar más sobre el auto de Facundo y descubrió que era un modelo antiguo y muy valioso.
Entonces, decidió hacerle una oferta que no pudiera rechazar:"Facundo, sé que este auto significa mucho para ti, pero yo también tengo algo que valoro muchísimo: mi colección de juguetes antiguos. Si me vendes tu coche, te daré todos mis juguetes más preciados".
Facundo dudó por un momento antes de responder:"Bueno... nunca he tenido una colección de juguetes antiguos antes... "Juan sonrió emocionado. Sabía que había logrado convencer a Facundo.
Pero cuando llegaron a realizar el trato en la notaría local, hubo otro giro inesperado en la historia: resulta que el padre de Juan trabajaba en esa notaría y conocía bien a Facundo.
Al ver lo generoso y perseverante que había sido Juan para conseguir su sueño del primer coche propio sin rendirse ante las negativas de Facundo; el padre de Juan decidió hacerle un regalo especial. "Facundo, sé que este auto es muy valioso para ti.
Pero si lo vendes a mi hijo, te ofreceré el doble del precio original y además te daré una cena en el mejor restaurante de la ciudad". Facundo no podía creer su suerte. Finalmente aceptó la oferta y vendió su coche a Juan. Juan estaba más feliz que nunca.
Ahora tenía su propio coche y había aprendido una lección importante: nunca rendirse ante los obstáculos y siempre buscar alternativas creativas para alcanzar sus sueños.
FIN.