El sueño de Leo

Leo era un niño de ocho años que amaba el fútbol. Su equipo favorito era Newell"s Old Boys, al que seguía en todos los partidos y entrenamientos.

Él soñaba con algún día jugar en ese equipo, pero sabía que tendría que trabajar duro para lograrlo. Un día, mientras caminaba por la calle con su mamá, vio a unos chicos jugando al fútbol en un terreno baldío. Se acercó y les preguntó si podía jugar con ellos.

Los chicos lo miraron de arriba abajo y se rieron. "¿Tú? ¿Jugar al fútbol? No creo que puedas hacerlo", dijo uno de ellos burlonamente. Leo se sintió triste y decepcionado, pero no dejó que eso lo detuviera.

Decidió practicar más duro para demostrarles a esos niños que sí podía jugar bien al fútbol.

Así comenzó una rutina diaria para Leo: después de la escuela, corría hasta el terreno baldío y practicaba durante horas con una pelota vieja que había encontrado en su casa. A veces se caía o perdía el control del balón, pero siempre se levantaba e intentaba otra vez. Poco a poco, Leo fue mejorando sus habilidades futbolísticas.

Un día decidió retar nuevamente a los chicos del terreno baldío a un partido de fútbol. "¡Vamos! ¡Juguemos un partido! Yo les aseguro que puedo ganarles", dijo Leo confiado. Los chicos aceptaron el reto y comenzaron el partido.

Al principio no le iba muy bien a Leo; estaba nervioso y cometió algunos errores. Pero luego de un rato, comenzó a jugar mejor y marcó dos goles seguidos.

Los chicos del terreno baldío se quedaron impresionados con el talento de Leo y lo invitaron a jugar con ellos más a menudo. Desde ese día en adelante, Leo practicaba aún más duro para mejorar sus habilidades. Participó en torneos locales y ganó muchos partidos.

Finalmente, su sueño se hizo realidad cuando fue reclutado por Newell"s Old Boys para jugar en las divisiones juveniles. Leo aprendió una valiosa lección: nunca rendirse ante los obstáculos y siempre trabajar duro para alcanzar tus metas.

Y así, se convirtió en un ejemplo inspirador para otros niños que también soñaban con ser futbolistas algún día.